Buenos recuerdos con el juego de las tabas. ¿Te acuerdas? Con esos huesos que nuestras madres nos conseguían y las horas que les dábamos.
Para ver los orígenes de las tabas nos debemos remontar a la Grecia antigua, donde se lanzaban para predecir el futuro. Se usaban también como dados para las apuestas y, muy frecuentemente, para jugar al juego que aún se conoce como las tabas. Las pinturas de algunas cerámicas griegas muestran tanto a dioses como a hombres jugando a las tabas, y la Llíada y la Odisea de Homero aluden a juegos similares. Sófocles atribuye la invención de las tabas a Palamedes y dice que éste enseñó el juego a los soldados griegos durante la guerra de Troya; pero parece más probable que tuviera su origen en la antigua Asia.